LA ASTRO-PSICOLOGIA DE LAS SIETE ENFERMEDADES PRIMARIAS DEL HOMBRE, SEGÚN EDWARD BACH
(Peter Damian - Parte II)
De la crueldad Bach escribió: "La crueldad es una negación de la unidad del Todo y una incapacidad para entender que cualquier acción que se adversa a otro se opone al todo y es por eso una acción en contra de la Unidad"
¿Cuántas veces se nos ha exhortado a hacer a otros lo que no nos gustaría que hicieran con nosotros? ¿A amar al prójimo como a uno mismo? Bach entendió lo que todos los grandes filósofos exponen, la hermandad del hombre, la unidad de toda la vida, la unidad de la Creación y de su Creador.
A Marte se lo ha denominado el planeta de la crueldad y todas las formas del dolor se relacionan con alguna forma de crueldad. Bach reconoció que el dolor, fiel a todas las leyes del karma y la recompensa, volverá a hospedarse en el hogar, y que toda persona aprenderá a través de su propio sufrimiento persona por qué él ó ella no deberían infligir dolor a otro.
La crueldad puede ser física ó mental. Las aflicciones en un horóscopo que incluya a los planetas Saturno y Mercurio están causados por modos de crueldad que alteran la mente. Agréguese a esto una influencia no-constructiva de Marte y encontramos así pensamientos crueles ó palabras cargadas de dureza y amargura. Cuando está mal aspectado, Marte pasa del ataque verbal a la acción, si las aflicciones astrológicas parten de Saturno y/o Urano. Todos somos capaces de ejercer la crueldad que dramatizan los tipos Chicory e Impatiens, sea ésta intencional ó por simple descuido.
Plutarco hablaba del odio como uno podría hablar de una enfermedad infecciosa y transmisible. Bach comparte esta afirmación de que el odio es una verdadera enfermedad y escribió que el odio -como opuesto al amor- es el reverso de la Ley de la Creación. Decía que se opone al esquema divino y es una negación del Creador.
Los castigos para el odio son la soledad, un temperamento violento e incontrolable, "tormentas" mentales nerviosas y estados de histeria, según Bach.
Astrológicamente, al sentimiento de odio lo acompañan con mucha frecuencia las aflicciones astrológicas de Saturno y/o Marte. El temperamento violento y la ira aparecen cuando Urano está relacionado con estos planetas. Mercurio puede focalizar el odio en los estados que Bach llamó "tormentas mentales". al menos simbólicamente, el odio parecería combinar las acciones del miedo (Saturno) y la crueldad (Marte).
El odio aísla. En astrología, los mismos aspectos que indican miedo reprimido, resentimiento y egoísmo condicioso son aquellos rasgos que predisponen al individuo a la enfermedad llamada cáncer.
Bach sostenía que el amor a uno mismo (egoísmo), causaba enfermedades de la instrospección, com la neurosis y la neurastenia. A las dolencias que se nutren de la preocupación e intoxicación de uno mismo podemos añadir el estado de obsesión ó perturbación psíquica. El amor a uno mismo ofende a la Unidad cuando hemos puesto en primer lugar nuestros intereses frente a los intereses de la humanidad.
En suma, nosotros somos los guardianes de nuestro prójimo y debemos participar en la protección y el cuidado de quienes nos rodean. Tales errores de egocentrismo nos recuerdan los tipos de remedios florales, Clematis y Chicory, y luego Gentian y Rock Rose.
Astrológicamente, los signos de agua (a los cuales corresponden tres de estos tipos mencionados), son los más proclives a la introspección. Tauro, el signo para Gentian, se merece una distinción especial a este respecto, ya que implica la inercia. Los otros dos signos de tierra, Virgo y Capricornio, también figuran en este tipo de defecto. El significador planetario principal de esta condición debería ser la Luna, que simboliza nuestros ánimos y emociones.
Cuando la Luna (que gobierna nuestros sentimientos y recuerdos), está mal aspectada, somos proclives a experimentar estados de ánimo lúgubres y soñadores, con excesiva introspección y enredos dentro de nosotros mismos, especialmente cuando la aflicción lunar involucra a Saturno, Plutón ó Neptuno. Plutón y Neptuno pueden contribuir a la enfermedad de la psiquis.
La ignorancia, según la explica Bach, es la incapacidad de aprender. Se relaciona con un rechazo a observar la verdad tal como ocurre en nosotros y a nuestro alrededor. Bach agrega que la ignorancia, además de las dificultades que trae a todos los asuntos cotidianos, a menudo sufre las consecuencias de una visión ó audición disminuídas, como la miopía ó algún otro deterioro ó privación. Una vez más la astrología reconoce la relación entre la mente y el cuerpo; porque en y bajo la regencia del planeta Mercurio, vienen tanto la adquisición del conocimiento como la capacidad para el equipamiento sensorial del cuerpo físico. Las aflicciones de Mercurio pueden causar dificultades de aprendizaje, impedimento en el habla ó deterioros sensoriales totales como la sordera.
Las personas que se resisten a oír los llamados más agudos de la mente y del alma, que permanecen sordos a los llamados de nuestra evolución hacia el esclarecimiento, ó que ciegamente ignoran a su prójimo, pueden descubrir un día que sus sentidos fallan exactamente como se atrofiaron y decayeron sus sentidos espirituales. Esto nos recuerda al tipo Gentian (tan lento para aprender) y al tipo Cerato (que se deja llenar de información mientras que permanece vacío de conocimiento).
Astrológicamente hablando, los signos de tierra son los que más a menudo caen presa de una prosaica inclinación por lo material, y cuando Mercurio está en Virgo ó en Tauro, estas personas pueden volverse intolerantes ó tan porfiadas que todo crecimiento queda inhibido. Sin embargo, dentro de la capacidad de todo el horóscopo, y por eso, también dentro de nuestra alma misma, queda la posibilidad de buscar y prestar atención a los mensajes de la verdad. "El que tenga oídos para oír, que oiga"
(…continuará)
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